La educación creadora de valor y Daisaku Ikeda, fundador de la Universidad Soka:
Conferencia inaugural

Por Ryohei Tanaka
CUADERNOS DEL INSTITUTO IKEDA · 1 · Jun. 2020


1. La educación creadora de valor de Tsunesaburo Makiguchi

Para comenzar, quisiera introducir brevemente la Universidad Soka. El campus se encuentra en la ciudad de Hachioji, a las afueras de Tokio. Tiene una superficie de 870.000 metros cuadrados.

Área central del Campus de la Universidad Soka en Hachioji, Tokio

La universidad fue fundada en 1971 y comenzó con tres facultades: Economía, Derecho y Literatura. Actualmente, se ha desarrollado hasta contar con ocho facultades y diez departamentos. La Universidad Soka es una universidad de tamaño mediano donde estudian alrededor de 8000 estudiantes, entre grado y máster, y trabajan unos 500 profesores asociados.

Global Square, uno de los edificios principales del campus de la Universidad Soka

Tanto en la entrada principal a la universidad como en su Torre Central, se leen los caracteres de «Universidad Soka».

Caracteres de «Universidad Soka» en la entrada principal (izquierda) y en la Torre Central del campus

Quien promovió originalmente la educación Soka fue un educador llamado Tsunesaburo Makiguchi, cuyo legado fue heredado por Josei Toda y después por Daisaku Ikeda.

Los caracteres mostrados en las imágenes de la entrada y la Torre Central del campus reproducen los que trazó en 1941 Makiguchi, justo treinta años antes de la apertura de la universidad. En «soka», «so» significa «creación» y «ka», «valor». Al unir estos dos caracteres, se lee «creación de valor».

Reproducción de los caracteres trazados por Tsunesaburo Makiguchi, precursor de la universidad

Makiguchi era geógrafo. Trabajando como educador, estudió las distintas filosofías educativas. Adoptó un pensamiento reformador y sus escritos al respecto se recopilaron en una obra titulada El sistema pedagógico de la creación de valor. Once años después de la publicación de esta obra, Japón intervino en la Segunda Guerra Mundial. Makiguchi fue arrestado por protestar contra el control de pensamiento ejercido por el gobierno militarista japonés, y falleció en la cárcel en 1944, antes de la finalización de la guerra.

Makiguchi era un hombre de convicciones, pero era también una persona de amor compasivo que vertía un cariño incondicional hacia los niños. Se conocen numerosos episodios de Makiguchi cuidando a niños, y en particular a niños enfermos o de familias pobres. Las siguientes palabras de Makiguchi transmiten su sinceridad como educador: «Todos son alumnos por igual. No existe ninguna diferencia desde el punto de vista de la educación. […] Aunque, circunstancialmente, ellos estuviesen cubiertos de polvo, ¿cómo es posible no fijarse en la resplandeciente luz vital que emiten a través de las sucias prendas. […] Ante la cruel discriminación de la sociedad, los profesores son los únicos seres capaces de defender a estos niños».

Ilustraciones de escenas de la vida docente de Makiguchi | Véase https://www.sokanet.jp/pr/recommend/20160525-makiguchi/

En El sistema pedagógico de la creación de valor Makiguchi definió la “educación Soka” como “sistema de conocimiento que forma a personas capaces de crear valor, el propósito de la vida”. Asimismo, observó que “la educación Soka es un término completamente nuevo, pero es sino enseñar a vivir una vida que responda a sus necesidades prácticas, es decir, a la creación de valor”.

Edición original de Sistema pedagógico de la creación de valor

Además, propuso que el valor principal de la vida es la “felicidad”, y enseñó que la “creación de valor” es, en otras palabras, “crear la felicidad”, y que la educación existe para la “felicidad de los niños”.

En la misma obra, Makiguchi comentó que “el objetivo de la educación no está en la transmisión del conocimiento sino en orientar el sistema de aprendizaje. […] No consiste en que hagan propio sin esfuerzo los tesoros del corazón descubiertos por los demás, sino en permitirles experimentar el proceso de investigar y descubrir”. Así, exigió que los profesores fuesen quienes guiaran a los alumnos en tal proceso de aprendizaje, dando importancia al hecho de que los alumnos hicieran propia esta forma de aprender.

Quien se esforzó en la publicación de Sistema pedagógico de la creación de valor como discípulo de Makiguchi fue Josei Toda, quien posteriormente asumiría la segunda presidencia de la Soka Gakkai. Él también fue encarcelado, junto con Makiguchi, pero salió vivo de la cárcel. Desarrolló el deseo de Makiguchi y, superando el marco de la pedagogía, se puso en pie por la reconstrucción de un movimiento capaz de hacer realidad la felicidad de las personas y la paz de la sociedad, que actualmente se conoce como Soka Gakkai y que pone en práctica el budismo Nichiren.

En una ocasión, Makiguchi compartió con Toda sus expectativas sobre la creación de una escuela que pusiera en práctica la educación Soka, diciendo: «Seguramente yo construiré una escuela basada en la pedagogía Soka que estoy investigando en estos momentos. En caso de que no lo lograse en esta vida, espero que tú, Toda, te encargues de ello». Toda expandió este proyecto hasta la enseñanza superior y lo compartió con su discípulo, Daisaku Ikeda, a quien años después dijo: «Daisaku, construyamos una universidad, la Universidad Soka. Ojalá logremos construirla mientras esté vivo, pero puede que no sea posible. En tal caso, cuento contigo, Daisaku. Hagamos que sea la mejor universidad del mundo».

Y finamente la Universidad Soka fue fundada en 1971. Habían pasado cuarenta años desde la publicación de Sistema pedagógico de la creación de valor, treinta desde que Makiguchi compartiera la idea de fundar instituciones educativas basadas en la educación Soka, y unos veinte desde que, en noviembre de 1950, Toda hablara con Daisaku Ikeda por primera vez sobre su proyecto de fundar la Universidad Soka.

El fundador, Daisaku Ikeda, reflexionó sobre el proyecto de Toda en el siguiente pasaje: “Mi maestro Josei Toda hablaba continuamente sobre la ideología del maestro Makiguchi. Cada vez que le escuchaba, yo renovaba mi determinación. Pensaba para mis adentros: ‘Si no se pudiera hacer realidad en vida de Toda Sensei, yo mismo me encargaré de llevarla a cabo. Heredaré la idea de mi maestro y haré que se materialice’. Tenía la certeza de que este era el camino correcto como discípulo”.

2. Daisaku Ikeda y la educación humanística de la Universidad Soka

Daisaku Ikeda no solo ha desarrollado mundialmente actividades por la paz, cultura y educación a través de la Soka Gakkai, sino que también estableció la Soka Gakkai Internacional (SGI), que es la red internacional de la Soka Gakkai. Coincidiendo con la fecha de establecimiento de esta (en 1975), el 26 de enero, el Sr. Ikeda viene publicando anualmente propuestas de paz desde 1983. Se trata de documentos que, basados en la filosofía budista de la paz, recogen propuestas concretas para abordar los diversos problemas que enfrenta la humanidad –sociales, medioambientales, educativos, entre otros– y que atraen atención tanto dentro como fuera de Japón. La lucha incansable de Ikeda Sensei por la paz, cultura y educación, con la filosofía budista por la paz como base, y los resultados de tales acciones, son foco de reconocimiento a nivel global, tal y como demuestran los más de 380 títulos académicos y reconocimientos que ha recibido de instituciones educativas o de investigación de 53 países y territorios. Como saben, uno de esos títulos se lo confirió la Universidad de Alcalá.

Ahora, quisiera compartir los lemas de nuestra universidad. La pedagogía Soka de Makiguchi y Toda, los principios filosóficos del humanismo budista que se encuentran en la base, y la educación a la que aspira la Universidad Soka se condensan en los siguientes lemas de la universidad:

  1. Ser un centro de estudios para la educación humanística.
  2. Ser fuente de una gran nueva cultura.
  3. Ser una fortaleza para la paz de la humanidad.

Dicho de otro modo, la Universidad Soka aspira a:

  • Como “centro de estudios para la educación humanística”, forjar personas de valor que aborden seriamente los distintos retos que enfrenta la humanidad.
  • Como “fuente de una gran nueva cultura”, mediante la solidaridad de las civilizaciones mundiales, desarrollar una nueva cultura mundial centrada en “la dignidad de la vida, la coexistencia y la paz”.
  • Como “fortaleza para la paz de la humanidad”, desarrollar y mantener la “ideología por la felicidad de uno y de los demás”, para hacer realidad la paz mundial.

Además, con ocasión de la inauguración de la Universidad Soka, el fundador Ikeda presentó a los estudiantes sendas guías para hacer realidad el espíritu de la universidad:

  • ¿Por qué propósito se debe cultivar la sabiduría? Jamás olviden hacerse esta pregunta.
  • Únicamente el trabajo y la devoción a la propia misión dan valor a la vida.
Estatuas de bronce en el en campus de la Universidad Soka

Estas palabras están grabadas en estas dos estatuas de bronce instaladas en el campus, y se han convertido en guías eternas de la Universidad Soka no solo para los estudiantes, sino también para los profesores y el personal de la universidad. “¿Para qué y para quién estudiamos?”: lo hacemos para la “felicidad de uno y de los demás”… Debemos acudir a la universidad cada día reconfirmando este punto. Más aún, el “valor de la vida” o “felicidad” se encuentra en una existencia contributiva, en despertar a la misión única de cada uno y superar las diversas dificultades.

Tales lemas y guías de la universidad delinean la imagen del estudiante al cual aspira nuestra universidad. El fundador Ikeda se refirió a las personas que reúnen tales cualidades como “personas de creatividad”. En la conferencia dada en ocasión de la tercera ceremonia de ingreso de la universidad, apeló a “ser personas de creatividad”, refiriéndose al significado de «Soka» (creación de valor) acuñado por Makiguchi. «‘Soka’, en «Universidad Soka», se refiere –sostuvo– a crear valor. Es decir, esencialmente la Universidad Soka debe aspirar a crear el valor que la sociedad ansía o en ir restaurando dicho valor».

Más aún, en 1996, cuando se cumplieron 25 años de la fundación de la universidad, Daisaku Ikeda brindó una conferencia en el Teacher’s College de la Universidad de Columbia, con el título «El desafío de formar ciudadanos del mundo». En esa conferencia fijó la mirada en el rápido avance hacia una sociedad global, estudiando las condiciones de un «ciudadano global» favorecedoras de la paz, que resumió así:

  • «Persona de sabiduría» capaz de comprender profundamente la interdependencia de la vida.
  • «Persona de coraje» que, en lugar de temer las «diferencias» de raza, etnia o cultura, hace de ellas la fuerza motriz del respeto, el entendimiento y el crecimiento.
  • «Persona de amor compasivo» que, sin limitarse a la vecindad, empatiza y se solidariza con el sufrimiento de todas las personas.

Esta conferencia de Daisaku Ikeda es, hasta el día de hoy, una referencia de suma importancia para la Universidad Soka y, como pueden observar en este gráfico, se condensa en la meta educativa del «desarrollo de ciudadanos globales de creatividad».

3. La educación Soka en el mundo

El objetivo de Makiguchi de la creación de valor y la felicidad de los niños fue desarrollado y expandido por Daisaku Ikeda aún más allá y, actualmente, se ha convertido en un sistema educativo creador de valor que incluye la enseñanza superior. El maestro Ikeda consideró que “la educación sería la empresa final de su vida”: comenzando desde la inauguración de la escuela secundaria Soka en 1968, hasta la actualidad, ha construido un sistema educativo en el que se imparten todos los niveles de enseñanza, desde la educación infantil hasta la enseñanza superior. Se han establecido escuelas de educación infantil en Sapporo (Japón), Hong Kong, Singapur, Malasia, Brasil y Corea del Sur, y escuelas de enseñanza primaria y secundaria en Japón y en Brasil.

Y en los EE. UU. se ha fundado una universidad.

Campus de la Universidad Soka de Estados Unidos, en Aliso Viejo, California

En la actualidad, se ha extendido al mundo entero un movimiento de investigación académico sobre el pensamiento y la filosofía de Daisaku Ikeda, como desarrollo práctico del Sistema pedagógico de la creación de valor iniciado por Makiguchi y Toda. Por ejemplo, en la Universidad DePaul, en los EE. UU., se estableció en 2014 el Centro de Investigación Educativa Daisaku Ikeda, y se inició un programa de posgrado centrado en la investigación de la educación Soka. También en la Universidad Laval de Canadá se están realizando seminarios sobre “Proyectos de educación para la creación de valor”. Por otro lado, en 2001, se estableció en la Universidad de Pekín una asociación de investigadores, que posteriormente se expandió a universidades de renombre como la Universidad de Nankai. A día de hoy, se han establecido centros de investigación Ikeda en treinta y dos universidades y organismos, y en China se celebra de forma bienal el Simposio Internacional sobre la Filosofía de Ikeda. Recientemente, también se han realizado simposios sobre la filosofía de Ikeda y la educación Soka en Perú y Filipinas.

Y aquí, en España, se ha llegado a concretar la inauguración del Instituto Universitario Mixto de Investigación en Educación y Desarrollo Daisaku Ikeda en la Universidad de Alcalá.

Para concluir, la Universidad Soka busca concretar la paz en la sociedad actual y buscar el mayor valor en la construcción de la felicidad propia y para los demás. Para ello, tiene como objetivo formar “ciudadanos globales creativos”, dotados con una naturaleza humana noble de “sabiduría, coraje y amor compasivo”. Para ello, aprendiendo de la ideología y acciones en pos la paz del fundador, deseamos ser una universidad que herede su espíritu.

Tomando como modelo la ilustre Universidad de Alcalá, y trabajando codo a codo con sus destacados profesores, es nuestro deseo avanzar por el camino de la contribución a la paz y felicidad de la humanidad.


Imágenes cedidas por la Universidad Soka.

Contenido protegido

Scroll al inicio